- 1 calabacín
- 1 cebolla pequeña
- 1 tomate pequeño
- 2 cucharadas de queso blanco rallado tipo suave
- 1 cucharadita de aceite de oliva
Preparación:
Lavamos el calabacín, lo secamos, lo cortamos por la mitad (en forma de barca) y hacemos unas pequeñas incisiones con el cuchillo en la pulpa. Metemos las dos mitades en el microondas 4 minutos. Quitamos buena parte de la pulpa con una cuchara y lo reservamos para después. Pelamos y picamos la cebolla y el tomate. Ponemos una sartén con una cucharadita de aceite y cuando esté caliente, colocamos la cebolla. Cuando empiece a ponerse transparente añadimos el tomate, la pulpa que quitamos al calabacín y sal al gusto. Le damos unas vueltas y rellenamos el calabacín. Ponemos un poco de queso rallado por encima y lo metemos al horno precalentado a 200º unos 7-8 minutos. Al final gratinamos un par de minutos y servimos.