¡Con el pan de jamón siempre huele a Navidad! En estos días asistí a un evento en el que lo sirvieron y confieso que a mí me encanta, me parece delicioso pero da poca saciedad, eso es lo que hace que uno no coma una sola rebanada, sino muchas más ¿te ha pasado?
Mi recomendación en este caso es que esperes un poquito para comerlo. En vez de comerlo desde el inicio del mes, puedes esperar hasta Navidad como tal. Eso no quiere decir que ahorita no puedas comer una rebanada y que en Navidad puedes hacer desastres y comerlo cuantas veces quieras.
Lo ideal es comerlo conscientemente ¿Qué he hecho yo? Lo comparto siempre y eso hace que disminuya la cantidad que como. ¿Por qué́ no me lo como completo? Porque no llena, y un alimento que no de saciedad, puedes llegar a comerlo sin parar; porque entre sus ingredientes está la harina de trigo, manteca, huevos, leche, tocineta, pasas, papelón o miel, aceitunas y jamón.
Ya sólo viendo los ingredientes uno se da cuenta de que tiene una carga calórica altísima y no es el alimento más saludable. Ojo, no quiero satanizar el pan de jamón, sino que entiendas que no hay que abusar de él.
Cuando comes una hallaca, percibes que comiste, que sientes saciedad y que ya es suficiente, ¿verdad? Pero con el pan de jamón no es así; esto lo digo SIEMPRE, es casi como un mantra, es importante la cantidad y la frecuencia.
Comer sin culpa es lo más importante para mí, por eso me doy mis gustos y siempre digo: de lo bueno, poco.
Si necesitas apoyo para saber cómo llevar una alimentación saludable que no excluya la comida rica y tradicional, aquí estoy. Escríbeme a metodocoma@gmail.com para hacer tu cita.
Ariana Araujo Tovar
Nutricionista y creadora del Método COMA